Si antes vimos la Torre Eiffel, nos vamos ahora al Arco del Triunfo, otro símbolo indudable de París, lugar de donde arrancan los Campos Eliseos, tercer lugar de la ciudad que atrae como un imán aunque uno no pueda pasar del quicio de la puerta de muchos de sus edificios. Más que por otra cosa, porque se puede uno gastar el sueldo de cuatro años en una sola compra de tamaño minúsculo.
Parece mentira también que en un país como Francia, republicano y laico hasta la médula, este y otros monumentos, sobre todo los religiosos, se mantengan y sean respetados de forma excepcional. Será porque uno piensa en ello como español, donde el pasado siempre se tiene que reflejar en el presente y recordarlo y recordarlo hasta la extenuación.
Parece mentira también que en un país como Francia, republicano y laico hasta la médula, este y otros monumentos, sobre todo los religiosos, se mantengan y sean respetados de forma excepcional. Será porque uno piensa en ello como español, donde el pasado siempre se tiene que reflejar en el presente y recordarlo y recordarlo hasta la extenuación.
Uma beleza de construção... e que céu tão azul!!!!
ResponderEliminarBeijo carinhoso.
¿sabias que la puerta de Alcala es el primer arco del triunfo construido despues de los del imperio romano? deberiamos conocer y cuidar mas nuestras cosas. ¿que pasa que en una republica no caben los cristianos? bueno en la nuestra no, y asi salió la cosa.
ResponderEliminarun abrazo
Gracias.
ResponderEliminarTeca, el cielo estaba limpio aquel día, así salió de bien al tener el Sol a la espalda.
Ripley, pues no sabía que era un arco del triunfo... mira, hoy me acuesto sabiendo algo más que mañana es lunes y toca currar.
Sobre lo otro, lo cierto es que con revoluciones, guerras y de todo, siendo el país más laico que se pueda visitar hoy en día, en Francia se conservan tanto monumentos, estatuas o escudos de algunos como Napoleón, que no fue precisamente un tío muy demócrata, como iglesias y otros monumentos claramente cristianos. Y por eso lo digo... porque en España, si hubiéramos tenido una historia parecida a la francesa, me da que no quedaba ni uno, por las bravas o por la Ley. Y miro para todos lados, que de todo ha habido en nuestra historia.
Un abrazo.
Bonito viaje Juan Carlos.
ResponderEliminarVeo paraguas... ah que son para otro uso. Es que me recuerda el día que yo lo visité porque llovía sin tregua.
Saludos
Gracias Sopalajo. De agua, ni gota, la de las fuentes en las que se acababa refrescando todo el mundo.
ResponderEliminarSaludos.
Hola Juna Carlos, cuanto razón tienes en tu comentario.
ResponderEliminarUn buen punto de vista del Arco del Triunfo, fuera de lo común. Me gusta.
Un abrazo
Gracias Abi. Lo cierto es que la hice nada más salir del Metro y sin pararme demasiado, que en el subterraneo, y eso que no lo sabíamos, esperaba la cola para subir arriba. Nada comparado con otros monumentos, escasos cinco minutos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Creo que salistes del metro de la misma estación que nosotros...Al pie del Arco del Triunfo:))
ResponderEliminarUna maravilla.
Un beso.
Exacto, salir del Metro y coger la cámara para hacerla, que casi inmediatamente había que meterse de nuevo bajo tierra.
ResponderEliminarUn abrazo.