Pero tiene algo de razón y de sentido comun, yo por mi parte no las pondria, pero hay tanto vandalo suelto, que ni por esas, aunque depende de que puertas no sirve para nada, ademas esteticamente le quita el encanto al medio natural, siempre que vamos al campo tenemos tendencia a sentirnos libres y en paz... es estimulante, pero si ves estas puertas,,,, mal vamos... aunque lo comprendo y poco mas que decir... solo que en la vida tenemos que cerrar muchas puertas para poder tirar adelante.... espero que eso cambie... un abrazo amigo.
Bueno ahora en realidad las tapias y las puertas están medio abandonadas en la mayoría de los casos. Que bosques de robles tan bonitos hay por allí Un abrazo Juan Carlos
Juan carlos... jaja en eso te doy la razón, esta queda genial, ademas con esas piedrecitas le da un toque muy chulo, estoy totalmente de acuerdo contogo, un abrazo.
Abi, le pongan las puertas que le pongan... sean físicas o virtuales...
Bird, está sobresaturada sobre la original pero es lo que yo veía con estos ojos. La cámara interpretó otra cosa... raramente. Porque mi cámara suele ser de las que aciertan con el WB en automático.
Juan Carlos, más que yo seguro, al menos el muro, de esos hace décadas que no se hacen.
Mariluz, muy rustico y muy invernal. Cada vez quedan menos paredes de piedra y por eso las que quedan tienen cierto aire nostálgico.
Estos robledales de por aquí, siempre han tenido algo de mágicos.
Javier, no te lo aconsejo. Dentro suele haber unos "simpáticos" animales con grandes cuernos, a los que las visitas humanas solo les gustan si es para darles de comer.
Me gusta mucho esta foto, el muro de piedra y los árboles con musgo en sus troncos que nos indica lo poquito que los ve la luz en casi todo el año. Quizás las puertas al campo, en este caso, sean necesarias para delimitar el espacio que ocupe algún animal. Saludos
Dado que el blog está inactivo todos los comentarios tienen moderación previa para evitar el spam, pero no te preocupes, si el tuyo es un comentario "normal" saldrá publicado.
Pero tiene algo de razón y de sentido comun, yo por mi parte no las pondria, pero hay tanto vandalo suelto, que ni por esas, aunque depende de que puertas no sirve para nada, ademas esteticamente le quita el encanto al medio natural, siempre que vamos al campo tenemos tendencia a sentirnos libres y en paz... es estimulante, pero si ves estas puertas,,,, mal vamos... aunque lo comprendo y poco mas que decir... solo que en la vida tenemos que cerrar muchas puertas para poder tirar adelante.... espero que eso cambie... un abrazo amigo.
ResponderEliminarPues que se las pongan, yo pienso quedarme dentro. Hermosa captura otoñal. Saludos
ResponderEliminarsi es que Juan Carlos, la "realidad" siempre supera a la ficciom. los seres humanos somos así. Cosas veredes que decia el caballero andante.
ResponderEliminarabrazos
Bueno ahora en realidad las tapias y las puertas están medio abandonadas en la mayoría de los casos. Que bosques de robles tan bonitos hay por allí
ResponderEliminarUn abrazo Juan Carlos
Gracias.
ResponderEliminarBird, no me negarás que esta al menos queda muy bien en la foto. Efectivamente hay que tirar para adelante.
Edward, mejor que no se las pongan, así no hay que saltar.
Ripley, esto de ficción tiene poco, anda que no hay puertas en ese camino, es un lateral del que enseñé en la entrada anterior.
Ángel, estas no, están la mayoría en uso, hay mucho ganado pastando. Los robles y los castaños es la seña de identidad de todas estas sierras.
Un abrazo.
Hola Juan Carlos, cada vez mas puertas se colocan en el campo, aunque no sean físicas.
ResponderEliminarUn abrazo
Juan carlos... jaja en eso te doy la razón, esta queda genial, ademas con esas piedrecitas le da un toque muy chulo, estoy totalmente de acuerdo contogo, un abrazo.
ResponderEliminarVaya toma otoñal más impresionante que has logrado. El muro de piedra y la cancela parece que tienen unos cuantos años ¿verdad?
ResponderEliminarSalu2
Gracias.
ResponderEliminarAbi, le pongan las puertas que le pongan... sean físicas o virtuales...
Bird, está sobresaturada sobre la original pero es lo que yo veía con estos ojos. La cámara interpretó otra cosa... raramente. Porque mi cámara suele ser de las que aciertan con el WB en automático.
Juan Carlos, más que yo seguro, al menos el muro, de esos hace décadas que no se hacen.
Un abrazo.
Aún había buen color de otoño!!
ResponderEliminarPor esta zona hay muchas puertas en el campo.Así y todo las vacas se salen cuando quieren:))
Un beso.
Gracias Laura. Le puse yo algo al color de mi parte.
ResponderEliminarUn abrazo.
Al menos ésta tiene un toque rústico, a tono con el paisaje :)
ResponderEliminarPor cierto, bonito bosque, se ve un lugar mágico!
Besos.
Me gustaría traspasarla para poder perderme entre esos árboles. Buena foto si señor. Un saludo.
ResponderEliminarGracias.
ResponderEliminarMariluz, muy rustico y muy invernal. Cada vez quedan menos paredes de piedra y por eso las que quedan tienen cierto aire nostálgico.
Estos robledales de por aquí, siempre han tenido algo de mágicos.
Javier, no te lo aconsejo. Dentro suele haber unos "simpáticos" animales con grandes cuernos, a los que las visitas humanas solo les gustan si es para darles de comer.
Un abrazo.
Me gusta mucho esta foto, el muro de piedra y los árboles con musgo en sus troncos que nos indica lo poquito que los ve la luz en casi todo el año. Quizás las puertas al campo, en este caso, sean necesarias para delimitar el espacio que ocupe algún animal.
ResponderEliminarSaludos
Esta es zona ganadera. el musgo más bien es por la humedad reinante. Gracias K@miz. Saludos.
ResponderEliminar