...porque para hacer una foto así hay que dejar un poquito de tiempo el obturador abierto.
En Marzo parecía que ya era posible... pero nos ha llegado un mes de "Abril aguas mil" que aunque hacía falta nos ha dejado ya con ganas de empezar a ver el Sol y que haga buena temperatura. Esta foto fue tomada el pasado 8 de marzo en Béjar, en pleno Parque Municipal.
Hace unos días os enseñé una foto realizada por mi ayudante de la estación de Béjar. Ahora os pongo una hecha justo desde el fondo que se ve en la otra. Aquella mirando hacia el oeste y esta mirando hacia el este.
En mis paseos de fin de semana ayer tocó recorrerse por la tarde el Pantano de Navamuño, muy cercano a Béjar. Las nubes, la niebla, la nieve (porque caía nieve), el ambiente... Parecía Enero en vez de Abril... Será mi estado de ánimo...
Sigo con mi particular paseo por el ferrocarril. En lo alto de un muelle abandonado, a donde en tiempos llegaba un vía que moría a sus pies, hay una grua que, ahora repintada, parece querer alcanzar el cielo.
Pues esta mañana me he dado un paseo (en coche) por diversos lugares de la comarca bejarana y los ríos y arroyos van totalmente a tope. Este es un ejemplo, una simple torrentera a cuatro pasos de la Calzada romana de la Plata. 
Cuanto más recorría con el ayudante la vieja estación más me sobrecogía el abandono. Ver este poste que un día iluminó los andenes no hacía más que confirmar ese sentimiento.
Esta foto está tomada en el mismo lugar que unas cuantas que han salido en este blog, a unos kilómetros de Béjar, en la carretera de Lagunilla, nada más pasar el cruce de Valdelamatanza. Hay un pequeño parque forestal, de los tantos que creó el ICONA y que por esta zona abundan, donde se han instalado unos juegos para niños (los mismos que en muchos otros).
Vi las margaritas mientras el ayudante se subía a los juegos del Parque de Santa Ana. Lo que no vi, hasta que me acerqué, fue el insecto que había posado sus patas en el centro de una de ellas. No se asustó, debía de estar muerto de frío, y me pude acercar lo que consideré prudente para que no volara.
Pues en esta mañana plomiza de primavera el ayudante y yo nos hemos ido de visita a dos parques bejaranos. La de arriba es mía, es el Parque de la Antigua, rodeado por el norte y el oeste por las murallas de Béjar. Es un parque de muy gratos recuerdos y el lugar al que apunté más gratos todavía aunque en casi 13 años ha cambiado un poquito.
Estábamos en el parque y surgió el hacer una foto mirando al Sol con las ramas de los árboles en primer plano. ¿Será una premonición de que quizá el final del túnel se acerca y empiezo a ver la luz?
Las barreras, humanas e irracionales a la vez, invisibles, pero que se sienten tan visibles como estas cadenas, impiden muchas veces la felicidad de las personas.
En mi paseo dominical por los alrededores de Béjar encontré esta mariposa que se dejó fotografiar sin demasiados problemas.
El pasado viernes, paseando por el cercano paraje de Llano Alto descubrí este encuadre de la iglesia del pueblo de Candelario.
Gracias a Manolo, Antonio y Jesús está mañana la he pasado un poco más acompañado. El recorrido me traía recuerdos, de hace unos seis meses... ¡¡cómo pasa el tiempo!! 
Buenísimos recuerdos me trae este lugar, eran otros tiempos a pesar de la cercanía temporal. Ribacardo, una magnífica Posada Real en las Merindades burgalesas. Prometo volver por allí cuando pueda.
Fue difícil. En principio solo había una cigüeña. Cuando apareció la otra y empezó a batir las alas hice alguna que otra foto pero no quedó demasiado bien el enfoque de las mismas... Así que he decidido sacar la mejor.
