Juan Carlos, ese barco mecido por las aguas del riachuelo viaja en pos de la aventura.... Te ha salido muy bonita, con esos graciosos bucles charolando la corriente.
Una fotos muy buenas, soy nuevo tanto en el mundo de los blogs, como en el mundo de la fotografía, y estoy mirando los blogs de otras personas. Sin duda me hago seguidor tuyo ;-)
Tengo una parecida, pero en un charco, en vez de un arroyo. Creo que a todos nos ha gustado siempre tirar cosas al agua y ver como se van alejando. Abrazos! Ah, y muy guapa Henar en plena montaña. El aire puro siempre sienta bien :))
Agua límpida y cristalina, digna de la nieve que le ha dado ser. Me da la impresión de que debe estar congelada, pero esa sensación la hoja no la tiene. Planea libre y sosegada sobre la superficie. No tiene miedo. Quiere conocer mundo y librarse de las ataduras de su árbol-madre.
Qué foto tan preciosa y que recuerdos. Yo siempre hacía barquitos en el Canalizo cuaqndo era pequeña. Recuerdo la frialdad del agua y las risas. Un beso compa.
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Hola Juan Carlos, me has hecho retroceder a la infancia cuando jugaba con este tipo de barquitos en los arroyos y en el río que pasa por mi pueblo.
ResponderEliminarGracias.
Un abrazo
jejejejeje...parece un espejo sucio,al que hay que quitarle las motas de polvo.
ResponderEliminarUn Barquito con destino o sin destino?
Muy bonita.
Besos
Juan Carlos, ese barco mecido por las aguas del riachuelo viaja en pos de la aventura.... Te ha salido muy bonita, con esos graciosos bucles charolando la corriente.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias a todos.
ResponderEliminarMe llamaron sobre todo la atención los reflejos del fondo y a continuación vi la hoja que podía darle un detalle en primer plano a la foto.
Un abrazo.
Una fotos muy buenas, soy nuevo tanto en el mundo de los blogs, como en el mundo de la fotografía, y estoy mirando los blogs de otras personas.
ResponderEliminarSin duda me hago seguidor tuyo ;-)
Muchas gracias Xmlara. Vuelve cuando quieras. Pasaré a verte.
ResponderEliminarSaludos.
Tengo una parecida, pero en un charco, en vez de un arroyo. Creo que a todos nos ha gustado siempre tirar cosas al agua y ver como se van alejando.
ResponderEliminarAbrazos!
Ah, y muy guapa Henar en plena montaña. El aire puro siempre sienta bien :))
Gracias Mariluz. Lo cierto es que no tire nada... estaba ahí la hoja seca de roble.
ResponderEliminarEl aire puro sienta fenomenal.
Un abrazo.
Un barquito majo, si, chiquitito y que sabe navegar, mejor que el de la canción :)
ResponderEliminarLos reflejos en el agua hacen unos colores muy chulos, ademas de lo tranquilita que parece el agua y cristalina y ya no dudo lo de fresquita.
Los pequeños detalles :)
Apertas
Agua límpida y cristalina, digna de la nieve que le ha dado ser. Me da la impresión de que debe estar congelada, pero esa sensación la hoja no la tiene. Planea libre y sosegada sobre la superficie. No tiene miedo. Quiere conocer mundo y librarse de las ataduras de su árbol-madre.
ResponderEliminarUn beso
Gracias a las dos. Un abrazo.
ResponderEliminarEn las cosas más simples se halla la belleza más grande.... felicidades por tan buena imágen :)
ResponderEliminarQué foto tan preciosa y que recuerdos. Yo siempre hacía barquitos en el Canalizo cuaqndo era pequeña. Recuerdo la frialdad del agua y las risas.
ResponderEliminarUn beso compa.
Gracias.
ResponderEliminarCris, efectivamente lo más simple a veces es lo más bello.
Marina, veo que te divertías en el Canalizo. Hoy está desconocido a cuando la gente subía allí con asiduidad.
Un abrazo.
¡Qué bonita!
ResponderEliminarGracias Dorian, también por el seguimiento. Saludos.
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